Entre otras cosas, la nueva Ley Karin exige a los empleadores PREVENIR la violencia en los entornos de trabajo.

Esta nueva exigencia implica que los empleadores deben fortalecer y proteger la seguridad de sus trabajadores para garantizar ambientes laborales seguros y, además, estar preparados para enfrentar cualquier requerimiento legal y cumplir con la ley.

Los empleadores ahora debemos tener un enfoque proactivo para tomar medidas de prevención con el fin de proteger a nuestros trabajadores en caso de violencia, ya sea por parte de compañeros de trabajo, de clientes o de proveedores.